9.8.10

Robert Capa


Primero la paz. Blanca y efímera. Rodeándola una campaña interminable contra nosotros. Una vehemente lucha armada por el poder. Epidemia irreversible y quizás inherente y natural de la especie humana.
Aquí la teneís, ante los ojos de uno de los grandes fotógrafos del género de horror.

No hay comentarios:

Publicar un comentario