Además de sublime compositor, el genio de Úbeda dedica algún huequecito al dibujo; en este caso las obras son esbozos sencillos, en donde se mezclan collages con colores y trazos alegres, que en apariencia conviven en una espontánea sintonía. Gatos, peces, flores y demás inspiraciones hacen de las obras un trabajo entretenido lleno de sentimiento y pulsión, en este caso vida y obra vuelven a ir de la mano.
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