La Edad Media vio nacer una práctica que permitía conservar una memoria física, táctil y duradera de los difuntos: la máscara mortuoria. Se trata de un molde hecho de cera o yeso que se aplicaba sobre el rostro del recién fallecido para que sus facciones quedaran marcadas permanentemente. Originalmente para nobles y monarquía, la práctica se extendió a la captura de rostros de ilustres artistas, científicos y pensadores, a menudo para usarlas como guía en esculturas de estos grandes hombres. La práctica no se limitaba al momento de la muerte, sino que también existen ejemplos de moldes creados mientras la persona vivía. Copias de los moldes originales sobreviven todavía en museos y gracias a esta práctica se nos da la fascinante oportunidad de apreciar el rostro de grandes personajes de los últimos cinco siglos, tal y como lo presenciaron sus contemporáneos.
Tomás Moro (1778-1852). Máscara mortuoria del escritor, humanista y santo patrón de los políticos y gobernantes.
Sir Isaac Newton (1642-1727). Máscara mortuoria del físico y matemático.
Napoleón Bonaparte (1769-1821). Máscara mortuoria en bronce.
Abraham Lincoln (1809-1865). Máscara de molde tomado en vida.
Dante Alighieri (1265-1321). Máscara mortuoria del autor de La Divina Comedia.
Ludwig van Beethoven (1779-1827). Máscara mortuoria del compositor.
Benjamin Franklin (1706-1790). Máscara de molde tomado en vida.
Jonathan Swift (1667-1745). Máscara mortuoria del autor de Los viajes de Gulliver.
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Hola buenas,revise usted algún gazapo que se le ha escapado en el post, como las fechas de nacimiento y defunción de Tomás Moro y que la máscara de Beethoven que ha puesto no es mortuoria, sino tomada en vida. La mortuoria de Beethoven es esta = http://topcultured.com/wp-content/uploads/2012/07/Ludwig_Van_Beethoven.jpg
ResponderEliminarLa que usted ha puesto es la más famosa y tomada en vida del compositor.
Ah, y por cierto, la máscara de Dante es falsa, es una recreación muy posterior basada posiblemente en los retratos.
Un saludo, CBB